El próximo jueves 29 de junio, a partir de las 21:00 horas, en la piscina del CDU Los Bermejales, celebraremos la Fiesta del Agua. Un espacio pensado para que menores y adultos disfruten de una jornada de puertas abiertas al ritmo de dinámicas acuáticas, bailes y derroche de creatividad. Durante el evento, además, contaremos con la participación teatralizada de varios personajes animados. A continuación, te presentamos el primer capítulo de esta historia escrita por Antonio Prada:

PERSONAJES:

El capitán “Nemo Náutico”

El semidiós “Maui Manu”

La “Sirenita saltarina”

El Pirata Jack “Es pájaro”

Y el náufrago “Robinson Javi”

Después de un largo tiempo frente a las orillas de cristalinas aguas en la exótica isla “SADUS”, nuestro querido Robinson “Javi” se hizo un gran especialista en las actividades acuáticas, un verdadero maestro de la natación y también del coco, por pura necesidad y supervivencia. Pero como náufrago de aquel lugar, no podía compartir sus conocimientos y habilidades con otros. Un buen día imploró, desesperado como estaba, en su larga soledad, al semidiós del viento y el mar: “Maui”

- ¡Oh Maui, tu que planificas tantas actividades y eres el héroe de los hombres! ¡Tú que congregas a familias enteras … haz que asistan a esta isla! ¡Organizaré una Fiesta acuática en tu honor!

En el atardecer de ese mismo día contempló sorprendido la figura de una sirena que saltaba sobre las olas del dorado mar hasta llegar a la orilla donde se encontraba. Su reluciente aspecto le sorprendió enormemente.

- Ya no estarás solo. Querido Javi. Me ha convocado Maui para organizar tu gran fiesta. Le dijo sonriente la sirenita, mientras se sacudía la plateada aleta sobre la tierra hasta que se transformaron en dos musculadas piernas de mujer. Se incorporó sobre ellas en la playa y comenzó a danzar mientras cantaba al atónito náufrago que la contemplaba, “Estoy aquí por ti, ¡Y una fiesta tendremos al fin!”

¡Ya no estaré nunca más en soledad!, se dijo para sí, Robinson Javi.

Lo primero, dijo la sirenita saltarina, será convocar una reunión con otros organizadores para que a la fiesta puedan venir el mayor número de personas.

¿Vendrán también niños? preguntó el náufrago. Claro que sí, será una isla abierta a todos los públicos, le respondió con voz cantarina la sirenita.

Estuvieron toda la noche bajo las relucientes estrellas, imaginando como podría ser aquella fiesta, hasta que sus parpados se rindieron a los sueños.

Al amanecer, vislumbraron a lo lejos una pequeña balsa que apenas podía flotar entre las olas. Sobre la misma, un mástil con una negra bandera y el famoso pirata Jack “Es-pájaro”

Hola, -dijo mientras caminaba hacia Javi y la sirenita, que se encontraban en la orilla. ¿es esta la isla “Rocas misteriosas del fin del mundo”?

No, que sepamos, dijeron al unísono Javi y la sirenita. Es la isla Sadus.

- ¡Ah, bien!, ¡no querría estar otra vez allí! Dijo aliviado el pirata. Pero ¿No habrá por aquí “Caminantes Nórdicos” verdad?

Estamos solos en este apartado rincón del mundo, volvieron a responder al curioso pirata.

- ¡Estupendo entonces, dijo alegremente mientras sus tripas le sonaban cual truenos oceánicos! ¿Hay algo para desayunar? Tenemos leche y pastelitos de coco…le contestó el náufrago.

¿Qué hacéis en esta isla? Preguntó Jack, mientras bebía de un coco. ¿Organizáis una fiesta quizás? Jajajaj, se rio sarcásticamente, como solía hacer, después de varias semanas a la deriva en una triste balsa zarandeada por el océano (no era la primera vez ni sería la última en sus múltiples aventuras).

¡Pues sí!, eso es precisamente lo que estamos haciendo.

¿De veras? Volvió a preguntar Jack sorprendido. ¡Me apunto! Contad conmigo y guiño satíricamente el ojo que tenía al descubierto.

Después de varios días organizando la fiesta, los tres, quedaron muy satisfechos con los preparativos.

Yo me encargaré de los bailes, dijo la sirenita. Pondré a todo el mundo a bailar en el agua, tú llevarás a cabo los juegos acuáticos y las dinamizaciones con las pelotas “cocos grandes” que hemos hecho, le dijo a Robinson Javi, que estaba encantado con todo aquello. Y tú, señalando al pirata Jack “Es-pájaro”, harás sonar los instrumentos musicales para la fiesta.

¿Y cómo atraeremos a esta isla a la gente? Preguntó el náufrago.

No te preocupes de eso. Hemos avisado a un capitán que los traerá en su nave el día de la fiesta al atardecer, cuando la luna esté gibosa creciente y una ola de calor sofocante nos inunde.

El día señalado llegó al fin, y en el horizonte marino comenzó a vislumbrarse una enorme y extraña máquina que emergía de las profundidades marinas.

¡Por las barbas del Gran Salazar! Gritó el pirata Jack, esa nave es tan grande como veinte ballenas…

Es el submarino “Nautilus” del capitán Nemo Náutico. Dijo la sirenita.

Al llegar a la isla, se abrió el gran portón del Nautilos. El primero en salir fue el capitán Nemo con su escafandra y armas náuticas, le siguieron cientos de niños y adultos con los bañadores y flotadores ya dispuestos para la fiesta acuática.

-Todos están inscritos para la fiesta y Maui está ultimando algunos detalles para este evento, quiere premiar a algunos niños deportistas, nos informó el capitán.

Continuará…

¿Llegará a tiempo a la fiesta el semidiós Maui?

¿Por qué está cargado de armas náuticas el Capitán Nemo?

¿Qué músicas nos habrá preparado el pirata Jack?

¿Se podrán saborear las “pelotas-cocos grandes” que ha preparado nuestro náufrago Javi?

¿Cómo serán los bailes de la sirenita saltarina?

Próximo capítulo: Los juegos del agua.

Las inscripciones para participar en esta actividad se pueden realizar a través de este FORMULARIO.